ARCHIVO de Realidades 2008

 

Tu deseo, ¿cuál es?

Al igual que las reflexiones y resoluciones que, como costumbre se traen a colación cada año, esta pregunta también es ya parte de la tradición navideña y en la cual interviene la prensa por aquello de hacer noticia.

“Paz, Armonía, Unidad familiar, Salud, Felicidad,  Echar a un lado las diferencias que nos separan, Paz y gozo en los corazones, Paz espiritual y emocional, y… Mucho Amor.”

Esas son algunas de las respuestas a la ya famosa pregunta sobre la cual inquieren los reporteros a varias personalidades cada año. Reconozco la importancia de cada una, creo que han sido muy acertadas; la diferencia estriba en que tal deseo debiera ser, no de ocasión, sino, permanente, no un deseo navideño, sino el anhelo de siempre hasta que sea hecho una realidad. No depende de otros, sino de cada cual, porque… paz, unidad, armonía, felicidad, gozo, salud y amor… se resume en un nombre: JESÚS, Él es nuestra Paz, nuestro Gozo y nuestra Felicidad. “En Él estamos completos.”

¿Mi deseo? -Que todos conozcan al único que puede convertir su sueño en la más sublime y hermosa realidad. Se llama JESÚS… El que viene a Él, no importando cual sea su condición, Él no le echa fuera. A los que están trabajados, cansados y cargados, Él les hace descansar. 

Los que nos hemos encontrado con el Salvador en nuestro camino, no podemos ignorar la necesidad del que aún vive sin Dios y sin esperanza; compartimos con otros lo que, en nosotros, ha hecho la diferencia. Por eso, como colaboradores suyos, buscamos hacer aquello para lo cual hemos sido llamados: Ministrar la reconciliación del hombre con Dios… “Dando por gracia lo que de gracia hemos recibido.”

“Porque de TAL manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él.” Juan 3:16-17

Por: Zaida C. de Ramón

Diciembre 2008

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¡Gracias te damos, oh Dios!

¡La gracia y la paz de Dios sea contigo ahora y siempre en el bendito y poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo!

La tradición es... sutileza hueca carente de sinceridad, hija de la religión y esclava de  hábitos y costumbres que, sin ton ni son, impone la sociedad. “Este pueblo de labios me honra; mas su corazón está lejos de mí.”  Mateo 15:8  

La tomo en cuenta, no para favorecerla, sino para combatirla… confrontando  la hipocresía con la sinceridad, la mentira con la verdad, y la injusticia con el amor. En esta ocasión me propongo recordar y exaltar el mandato de nuestro Dios de “Dar gracias en todo” (1Tes. 5:18) y esto… no un día en el año, sino… cada día, en todo tiempo y en todo lugar.

El mundo fundamenta la “celebración” del Día de Acción de Gracias en un hecho histórico en el cual se ha escogido a un animal como símbolo y centro del mismo. Tan es así, que ya muchos le han cambiado el nombre al susodicho día llamándole: El Día del Pavo. Se juntan las gentes en la efervescencia ya característica que emana de saber que el jolgorio navideño tradicional está a la vuelta de la esquina, tiempo que esperan con ansias los que necesitan llenar con “algo” su vacío interior.

Los cristianos damos testimonio de un Dios real que nos ama y que se agrada del que le honra y le toma en cuenta… siempre. Por eso, ese día nos reunimos y compartimos en familia, haciendo de nuestro amado Salvador el centro de la reunión, dando gracias a Dios, primeramente, por enviar a su Hijo al mundo a darnos salvación y vida eterna, y luego, por tantas bendiciones que de día en día de Él recibimos, sin merecerlo. Al otro día también damos gracias, y al otro, y al otro, y TODOS los días.

Los que nos hemos topado con Jesús en el camino, no nos cansamos de agradecerle su AMOR inefable. Todo el oro del mundo jamás será suficiente para poder pagar por su gracia bendita. Por eso…Hagamos de la acción de gracias un estilo de vida, no de un día, sino TODOS los días de nuestras vidas.  

“Damos gracias a Dios por llevarnos siempre en triunfo en Cristo Jesús.” 2Corintios 2:14

* * * * * * *

¿No son diez los que fueron limpiados? Y  los nueve, ¿dónde están? Luc.17:17

Al entrar Jesús en una aldea, le salieron al paso diez hombres leprosos, quienes pedían a Jesús misericordia para que los librara de tan terrible enfermedad que por años habían estado padeciendo. Según la costumbre, los envió a mostrarse a los sacerdotes. Mientras iban de camino fueron sanados y limpiados de su lepra.

Al ver que había sido sanado, uno de ellos, el único extranjero, empezó a glorificar a Dios por el milagro. Regresó y se postró a los pies de Jesús dándole gracias. Me imagino a Jesús mirando a todos lados buscando al resto de los beneficiados, pero éstos, siguieron su camino como si nada hubiera pasado. De diez, sólo uno reconoció la grandeza de Dios, sólo uno volvió a Jesús a manifestarle su agradecimiento, sólo uno se postró reconociendo el valor de la gracia divina. ¡Solamente… UNO!

La Biblia no dice qué pasó con los nueve malagradecidos, pero una cosa sé… y es que, habiendo recibido sanidad en sus cuerpos, éstos menospreciaron lo que era de más valor… la salvación de sus almas. Al samaritano, Jesús le dijo: “Levántate, vete; tu fe te ha salvado.” ¿Qué es más importante, la sanidad o la salvación? Jesús esperaba que el milagro los llevara a todos a reconocer su necesidad de amistarse con Dios. Sólo UNO aprovechó tan valiosa oportunidad… NUEVE la despreciaron.

¿No se te parece tal actitud a lo que vemos en nuestros tiempos? Muy pocos se niegan a recibir una oración por sanidad, muchos la piden. Pero, ¡qué muchos se resisten a recibir a Jesús para salvación!

Por: Zaida C. de Ramón

Noviembre 2008

 

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Se caen los ídolos

Historia super interesante la que el mundo está escribiendo! Los ídolos de barro se desmoronan ante nuestros ojos… Es hora de cambiar de rumbo y confiar en el Dios verdadero, el único que nos garantiza seguridad real y permanente. “Bienaventurado el hombre que puso en el Señor su confianza.” Salmo 40:4

La nación considerada como la más poderosa del mundo… se tambalea como un borracho carente de fortaleza física, mental y espiritual. Los desastres naturales, derrumbes materiales, males sociales y espirituales, están socavando a pasos agigantados los fundamentos de arena movediza en que se ha depositato la confianza.

La nación que, en una “involución o progreso retrógrado”, ha estado transformando el temor de Dios, en corazones engrosados y cabezas huecas, al cambiar la Biblia, por el humanismo, la fe en Dios, por el dinero, y la gracia divina, por la soberbia….  

¿Podrá el dinero resolver la crisis mundial? ¿Lo logrará la ciencia? ¿Podrá la religión hacer el milagro? O, ¿será un superhombre que, cual lobo vestido de oveja, intentará con su astucia engañar a los incautos?

Me cuesta encontrar razones que puedan justificar el afán de algunos por querer gobernar.¿Serán masoquistas o es que buscan, cual generación Babélica, hacerse de un nombre grande y poderoso? Aquellos hubieran logrado su empeño si Dios no hubiera intervenido para romper la unidad de propósito que los movía, pero, éstos, que ni eso tienen… el resultado de sus esfuerzos a billete “limpio”, será un caos mayor al que ya existe. ¡Es Cristo en nosotros la esperanza de gloria! Colosenses1:27

El que piense que el panorama mundial va a mejorar está soñando, y despertará para enfrentarse a la peor pesadilla jamás antes vista. Por eso, los que estamos siendo apercibidos una y otra vez, abrimos bien los ojos y aguzamos los oidos ante lo que el Espíritu muestra y dice a los hijos de Dios. Ciertamente vengo en breve"  Amén; sí, ven Señor Jesús.” Apocalipsis 22:20

Por: Zaida C. de Ramón

Octubre 2008

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El Teatro de la Vida

¡Con cuánta facilidad recurren algunas personas a la mentira haciendo del engaño una diversión! Han hecho de su vida un escenario en donde cada día es un derroche de pobres actuaciones cual mediocre artista frustrado buscando hacer de su próximo papel el climax de su carrera de ensueño que le lleve a obtener el más alto galardón. Y así, de día en día, continúan levantando el telón para divertir a los que, como ellos, necesitan seguir soplando la languideciente llama de esfuerzo vano y sin sentido que está a punto de extinguirse. Es este el resultado de vivir vidas vacías, sin principios ni valores… vidas carentes de significado en donde el temor al Dios verdadero brilla por su ausencia.

Cuando observamos el mover de una sociedad que a todas luces publica su necedad por su falta de temor a Dios, no podemos menos que compadecernos y seguir anunciando las buenas nuevas de salvación, en la esperanza de que alguno se deje alcanzar, aunque para lograrlo tenga que penetrar las más densas tinieblas.

Cuando se vive para enaltecer lo negativo, lo que está mal, lo que daña y lo que resta, es porque se ignoran los beneficios y bendiciones que supone el optar por la otra cara de la moneda. No hay términos medios: por un lado está el bien y por el otro, el mal; el primero garantiza la bendición, el postrero, la maldición. No hay que ser muy inteligente para reconocer que a las malas decisiones no le sigue nada bueno. ¿Por qué entonces tantos sucumben a hacer lo que saben que no está bien?

El término masoquismo se aplica a quien se complace en sufrir.  ¿Serán masoquistas aquellos que se resisten a vivir como Dios manda sabiendo que lo que le viene por hacer lo contrario son tristes consecuencias?

“No os engañéis;Dios no puede ser burlado:Pues todo lo que el hombre
 sembrare, eso también segará.” Gálatas 6:7

Por: Zaida C. de Ramón

Septiembre 2008

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Nuevas cada Mañana

Las misericordias de Dios son nuevas cada mañana; así lo dice la Biblia. Lo hemos leído en tantas ocasiones, pero ¿cuánto lo hemos vivido? No solamente en el momento de la conversión está disponible la misericordia de Dios sino… cada día.

¿Cuántas veces nos hemos ido a dormir en la noche con enfado o tristeza por algún suceso ocurrido durante el día, y en la mañana nos levantamos con la misma carga o tal vez con una más pesada? Y así seguimos acumulando los malestares que el diario vivir nos depara de día en día.

Si es esa la actitud que acostumbramos asumir en tales circunstancias dejando al factor tiempo el resolver lo que a nosotros/as conscierne, como un círculo vicioso se seguirán repitiendo tales episodios, arriesgando lo más preciado:la PAZ con Dios, con uno mismo y con los demás.

Si tomamos la decisión de que el lloro se desvanezca y pase como la noche, estaremos en la disposición de dar la bienvenida en la mañana… a la alegría. ¡Día nuevo, vivencias nuevas! No con el lastre ni el peso del día anterior, sino con la pureza que emana del amor de Dios. Si por sobre toda cosa, estimamos en su justo valor la paz que debe prevalecer entre Dios y nosotros, conoceremos realmente lo que es la misericordia y, entonces, podremos cantar con propiedad: “Has cambiado mi lamento en baile y me ceñiste de alegría.”

El que quiere… puede, y al que cree todo le es posible. Es la voluntad de Dios que estemos en gozo y en paz. Desatemos su Palabra con la vida y espíritu que le acompaña. Puedo testificar que funciona porque yo lo he vivido…

Cierta situación me produjo malestar; en lugar de dar rienda suelta al mismo, me refugié en el Señor. Eché mano de una lectura que me edificó sobremanera, cambiando así mi pensamiento y estado de ánimo. Al acostarme, me abrigué bajo las alas del Altísimo, haciendo la parte que a mí sólo correspondía para guardar lo más importante… la buena relación con mi Dios. Me acosté en paz y dormí toda la noche como un lirón. En la mañana amanecí como el día… completamente nueva, en la firme disposición de dar rienda suelta a la alegría… la cual se afirmó al echar a rodar un disco compacto de música instrumental que me acercó más al Admirable.  Una vez más vemos que: “El que está en nosotros es mayor que el que está en el mundo.” 1 Juan 4:4. Experiencias similares nos ocurren a todos.

Un paso fundamental: Decisión

Nuestra vida es el resultado de las decisiones que a diario tomamos aún sin pensar que lo estamos haciendo… cada palabra que hablamos, cada pensamiento que cultivamos, y cada cosa que hacemos o dejamos de hacer. Tomemos la firme determinación de despedir con cada noche las pequeñas zorras que intentan robarnos el gozo y la paz, y permitamos que la vida en nosotros se torne nueva y llena de alegría, cada mañana.

Por: Zaida C. de Ramón

Agosto 2008

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Después de la crisis... Viene la Bendición

¡Cuánto nos quejamos al transitar por una carretera que está siendo reparada! Luego, cuando la obra es finalizada, ¡cuánto la disfrutamos! ¡Cuánto tiempo tiene que esperar el agricultor y a cuántas dificultades se tiene que enfrentar desde que riega las semillas en su plantío hasta que recoge el fruto esperado! ¡Cómo sufre la mujer que está de parto, y cuán grande es su gozo al tener luego en sus brazos a la criatura que por 9 meses había estado anhelando! ¡Cuán grande el sufrimiento de Cristo en la cruz, quien enfrentó la muerte para luego… resucitar!

Y es que… a la bendición, siempre le precede una crisis, sea de la naturaleza que sea. Así lo dispuso Dios en su infinita sabiduría, aunque nos cueste entenderlo. No alcanzamos el triunfo si primero no peleamos la batalla…Creyendo, Confiando y Esperando en el Señor, en la certeza de que toda tempestad tiene su fin para dar paso a la bonanza.

Aquello que nos llega de manera fácil, como en bandeja de plata, lo subestimamos y no lo apreciamos como es debido, pero, lo que nos ha costado trabajo, sufrimiento y espera… siempre lo valoramos. La bendición que es parida por medio de la fe, jamás será subestimada y mucho menos menospreciada pues su valor es incalculable.

Si viéramos las adversidades como, la única senda para llegar a la otra orilla, o como la noche que pasa para ver brillar el sol en la mañana, o tal vez, como esa medicina que, aunque amarga, es la más eficaz para curar tal o cual enfermedad… nuestra fe se crecería en la alabanza y en la  acción de gracias… la queja, el malestar, la preocupación inútil y el sufrir en vano, pasarían a ser cosa del pasado.

Podemos concluir, entonces, que en toda circunstancia adversa, por imposible que parezca su solución, nos aguarda una Bendición, porque… “A los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien.” Ro. 8:28

Por: Zaida C. de Ramón

Julio 2008

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El Misterio Revelado

El concepto de lo que es un cristiano es relativo, depende del estereotipo que cada persona se haya forjado. Pero hay un denominador común en la mayoría: Pasan juicio sobre lo que hablamos, hacemos y/o dejamos de hacer.

“Y eso, que es cristiano/a.” Es la frase trillada que se escucha entre los jueces sociales cuando alcanzan ver o escuchar a alguien que se llama cristiano y que no aparenta vivir a la altura de sus ignorantes expectativas. “El que juzga a otro, se condena a sí mismo.” Eso dice la Biblia.

En ocasiones, se enjuicia con razón¹, otras veces sin ella².

  1. Malos testimonios de los que profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan.

  2. Los que, por ser fieles a Dios, son vituperados, perseguidos y calumniados. Estos son Bienaventurados…

Los que hemos tropezado con el Admirable, vivimos la vida tan normal y natural como el resto de los mortales… reímos, lloramos, cantamos, gritamos, hablamos, pensamos y actuamos. La diferencia: ¡Un corazón nuevo, un espíritu nuevo y una mente nueva! En eso consiste el misterio para aquellos que aún permanecen en el oscurantismo de la ignorancia.

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  1. Un corazón purificado por la fe en Jesús. Hechos 15:9

  2. Un espíritu de poder, de amor y de dominio propio. 2 Tim. 1:7

  3. Una mente renovada por la Palabra de Dios. Hebreos 10:16

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Cuando decidí dejar la religión vana, hueca, vacía, sin vida, sin Espíritu y sin fundamento y comencé una Relación con Jesús, el Amor de los amores, se hizo la luz en mi vida, dando ésta un giro de 180°…. Giro, que los que no han vivido tal experiencia, jamás lo podrán comprender por más que se esfuercen. Seguirán observando y juzgando hasta que se rindan.

“No que lo haya alcanzado, ni que ya sea perfecta; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui asida por Cristo Jesús.” Fil.3:12

“El hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.” 1 Corintios 2:14

Por: Zaida C. de Ramón

Junio 2008

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Bendición para las Madres

Saludos a todas las madres y mis deseos de las más ricas bendiciones. Aunque me considero antitradición por considerar especiales todos los días  y, creyendo que la madre debe ser honrada, atendida y respetada siempre, me uno a la costumbre ya establecida por la sociedad. Por lo menos un día al año, el mundo está dispuesto a reflexionar sobre el valor del ser que a Dios le plació usar para depositarnos en este mundo.

Bendiga el Señor a cada madre, supliendo cada necesidad, dándole la sabiduría necesaria para los embates del diario vivir, llenándole de poder y del Espíritu Santo y contestando todas y cada una de las peticiones que puedan tener ante el trono de la gracia. Yo, como madre también, me hago partícipe de la bendición y la recibo en el nombre del Señor proclamando victoria sobre cada petición que por Fe, declaro contestada.

Escuché a cierta persona exhortando a otros a que le digan a sus seres queridos cuánto se les ama, pues no se sabe el tiempo que los tendrán a su lado. Esto, en base a su propia experiencia. Creo que sería de gran bendición el que se adoptara tal práctica, pues como dicen por ahí… la demostración de cariño puede salvar vidas. ¿Qué hubiera sido de nosotros si no hubiéramos recibido el amor de Dios cuando más lo necesitábamos? Porque el amor real, sincero, diáfano y puro, no es un antojo o capricho de algunos…es una necesidad de todos.

¡Dios nos muestra su amor de tantas maneras! Una de ellas: Dar a cada cual una  persona en el mundo con la que podemos contar Siempre… Mi mamá solía decir muy acertadamente: “Madre hay sólo una.” Es la que se desvela cuando sus hijos se enferman, la que se preocupa para que cada necesidad sea suplida, la que vela, protege y defiende a sus retoños como nadie, la que deja de comer para que sus hijos coman, la que, a pesar de sus propias batallas, está siempre disponible para atender y amar a cada uno de sus hijos como sólo ella sabe hacerlo. “¡Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas.” Proverbios 31:10

¡No hay amor como el de la madre! Sólo el de Dios, que es perfecto, le sobrepasa, pero en la tierra… no hay otro que le iguale.

A todas las mamás… ¡MUCHAS FELICIDADES!

POEMA: Dulce... el Amor de Madre

Por: Zaida C. de Ramón

Mayo 2008

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Libertad ... una Necesidad

Creo que casi todos, en algún momento de nuestras vidas, hemos ido a algún zoológico con la idea de ver animales que solo en películas o en revistas habíamos visto. ¡Cuánto disfrutan los niños acercándose a éstos, tocándole y alimentando a unos pocos que se acercan, no con mucho ánimo!

Y es que, lo que para unos supone un negocio, y para otros una diversión, es la mayor de las crueldades para los protagonistas del evento, los cuales han sido sacados de su “habitat”, o ambiente natural, impidiéndosele que puedan vivir el ciclo de vida señalado por el Creador, en disfrute y en libertad. Me causa una tristeza inmensa ver a estos pobres animales, prisioneros, tirados sin ánimo, durmiendo casi todo el tiempo, y lejos del ambiente en el que podrían disfrutar conforme a lo que Dios dispuso para cada cual conforme a su especie.

Y, no hay que ir muy lejos para ser testigo de esa realidad … ¿Has visto a los hermosos pajaritos en minúsculas jaulas caseras, en donde se ven imposibilitados de ejercer lo que más les distingue de los demás animales, que es poder volar con toda libertad?

Y, si lástima nos produce este panorama con relación a la fauna, más tétrico y angustioso es el del ser humano que, por su propia voluntad, decide vivir fuera del ambiente propicio y vital, preparado por Dios, para su mayor bienestar y privándose a sí mismo de la verdadera libertad.

El que escoge vivir la vida a su manera, separado de Aquél que lo creó para que lo tomaran en cuenta, no por capricho, sino porque nos ama y sabe más que nosotros lo que nos conviene, se verá enfrentando dificultades de diferentes naturalezas a lo largo de toda su existencia y sin la asistencia divina prometida a los que le siguen… a menos que haga un alto y reconozca su pequeñez, su insuficiencia, su debilidad y su dependencia y necesidad de Dios.

En una aparente tranquilidad se mueven algunos(as), considerándose dueños de sí mismos, e ignorando que, en el mundo hay dos señoríos a los que, a uno de los dos, cada cual ha decidido pertenecer, guiados muchos, no por la razón, sino por su engañoso corazón: El reino de la Luz y el reino de las tinieblas, El Príncipe de Paz y el príncipe del mundo, El que es la Verdad y el padre de Mentira, El Buen Pastor y el ladrón y salteador, El Salvador y el Acusador … JESÚS y Satanás … En eso nos va la libertad, la paz y la vida eterna.

Cada cual, en un proceso que dura toda la vida, camina hacia la consecución y conquista de la meta que, con sus estilos, hábitos, actitudes y decisiones, se ha impuesto: VIDA o MUERTE, y ésto… eternamente. “Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte.” Prov.14:12.

Los animales son llevados cautivos sin que éstos puedan opinar al respecto, pero el ser humano, voluntariamente, decide el derrotero de su vida mediante el libre albedrío que Dios puso un sus manos y que no va a coartar. Si te amas a ti mismo(a) de verdad, piensa que, toda criatura debe depender de su Creador si es que quiere disfrutar de la libertad verdadera que Jesús nos vino a dar. Sólo permaneciendo en Él podemos tener la garantía y seguridad de una vida abundante aquí en la tierra y por toda la eternidad porque... separados de Él,  nada somos y nada podemos hacer.

Si ustedes permanecen en mi palabra, serán verdaderamente mis discípulos;
y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
Así que, si el Hijo los libertare, serán verdaderamente libres.
 Juan 8:31-32,36

Por: Zaida C. de Ramón

Abril 2008

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Eres... lo que Dios dice que eres

No creas a las exaltaciones o aberraciones que otros digan de ti. “No eres más porque alguien te elogie, ni menos porque te critiquen … Eres, lo que Dios dice que eres.” (Tomás de Kempis) Ni más … ni menos. Es eso lo que debe fundamentar la opinión que tengas de ti mismo/a, negándote a dar crédito a lo que piensen los demás. Cuando estamos convencidos de lo que somos en Cristo, nadie, sea quien sea y por mucho que se esfuerce, podrá jamás movernos de esa posición en la que Dios nos ha colocado. Es esa convicción lo que nos hace aceptarnos y amarnos tal y como somos para poder cumplir con el mandato divino de: “Amar al prójimo como a nosotros mismos.”

La lucha mayor del ser humano es la que tiene con sí mismo/a por no estar seguro/a de lo que es; condiciona su estimación propia a lo que otros piensan, le dicen o hacen. Son muchas las vidas que han sido afectadas de manera muy negativa por creer lo que otros piensan de ellos/as; debaten y discuten, en ocasiones con ira, precisamente, por la falta de seguridad en la opinión que tienen de sí mismos/as. El que está seguro de lo que es y quién es, hace caso omiso de lo que otros piensen o quieran hacerle creer.

La violencia de la que somos testigos cada día, a través de las noticias publicadas en los diferentes medios, es el resultado de la falta de templanza en aquellos que permiten que las circunstancias tomen autoridad sobre ellos cuando sienten que su autoestima es atacada. Como ésta depende de lo que los demás piensen o digan de ellos, no pueden permanecer firmes ante la provocación, dando rienda suelta, al descontrol y a la falta de dominio propio.

Sólo Dios y su amor inefable e incomparable puede hacer del ser humano, uno, tal y como Él lo concibió … a imagen y semejanza suya, la criatura dependiendo siempre de su Creador, reconociendo la necesidad de permanecer en Él por medio de la Fe en Jesús, quien nos hace más que vencedores. Todo el que vive en armonía con Dios, goza cada día de sus bendiciones; el que vive apartado… sufre las consecuencias.

Permanezcamos en Dios disfrutando de su amor, creyendo que somos lo que, en Jesús, Él dice que somos: “Su especial tesoro, sus pequeñitos, la niña de sus ojos … y todo lo que eso supone.”

“Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios y Dios permanece en él.” 1 Juan 4:16

Por: Zaida C. de Ramón

Marzo 2008

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Recesión Inminente

En este tiempo, el consumerismo está llevando a la gente a una debacle económica a la cual muchos no le están dando la importancia y atención que debieran por si aún tuvieran tiempo de escapar de lo que se avecina. Las deudas astronómicas que está enfrentando gran parte de la sociedad por gastar más de lo que reciben, por llevar estilos de vida que no pueden costear, por la negligencia, indiferencia y falta de responsabilidad al contraer compromisos financieros, etc., están socavando las fortalezas de los hogares tanto material, emocional, física y espiritualmente. Dicho de manera sencilla y clara … la mala administración de las finanzas es lo que impera.

Son estas personas las mismas que se quejan cuando los costos de los servicios del Gobierno suben, y es natural que así sea, pues sus prioridades están trastocadas por darle a los lujos, caprichos y placeres, mayor interés e importancia que a las necesidades y obligaciones. Gastar en lo necesario es prudencia; malgastar, es negligencia.

Son muchos los que no han aprendido a administrar sus finanzas en manera alguna, por lo que este panorama actual de atolladero económico sin vislumbrarse una salida airosa para algunos, es la consecuencia por causa de la negligencia enfermiza que por años, muchas familias e individuos vienen padeciendo. Triste es decir, que aún muchos llamados cristianos están inmersos en esta encrucijada por seguir los patrones que el mundo está constantemente imponiendo. DETENTE … Haz un alto, y pide a Dios que te dé sabiduría para que, también en esta área de tu vida, puedas disfrutar de la paz y tranquilidad que Dios quiere para sus hijos.

Yo puedo dar testimonio de que, en las finanzas también, nuestro Dios es el especialista por excelencia: Nos alerta, instruye y dirige a tomar las decisiones correctas, haciendo siempre lo que nos corresponde, según es Su voluntad. ¡Y, entonces, damos a El toda la gloria! Nos ayude el Señor a permanecer en la libertad con la cual El nos hizo libres.

“Amados, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas,
 y que tengas salud, así como prospera tu alma.” 3 Juan 2.

Por: Zaida C. de Ramón

Febrero 2008

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Resolución para la mayor Bendición

¡Cuánto nos preocupamos por satisfacer las necesidades de nuestros hijos, tanto física como materialmente! ¡Cuánto nos esforzamos para garantizarles un futuro estable en el área económica y social! ¡Qué mucha importancia le damos a prepararles para alcanzar logros y vivir con éxito en el mundo! Conforme a los valores establecidos por la sociedad así es la meta que se ha impuesto la mayoría, tanto para sí mismos, como para la generación que le sigue … Esta mentalidad, vana, frívola, sin fundamento y carente de lo esencial está haciendo estragos en la sociedad en todos los niveles … una pobre, necesitada y enferma sociedad. Se vive construyendo un presente cuyo principal ingrediente es el materialismo, influenciados por las huellas del pasado y caminando hacia un futuro incierto, por darle a lo efímero y pasajero mayor importancia que a lo verdadero y eterno.

Se ignora, se pasa por alto, se sub-estima y menosprecia lo más importante, lo de más valor, lo verdaderamente fundamental y vital … Una relación personal con Dios a través del único medio posible … Jesucristo. Si a todos los logros alcanzados no añadimos este ingrediente esencial, jamás llegaremos ni a la mitad del camino que cada cual necesita recorrer. No me refiero a Iglesia alguna, con su tradición o religión, sino a una … Relación, lo cual no es un privilegio o capricho de algunos, sino, una necesidad de TODOS. Puedes jactarte de la gran cantidad de "amistades" con las que compartes de día en día, pero, si has menospreciado la más importante de todas, eres la persona más pobre, la más solitaria, la más necesitada y la más digna de compasión de todos los mortales. Es la amistad con Dios la que te garantiza la PAZ y la riqueza de la que careces.

No hagamos de esta vida un afán constante por aquello que pasa y perece, ni permitamos que el mundo nos deslumbre con sus encantos y falsas ilusiones, porque “Donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.” Mateo6:21. No seamos indiferentes ante lo más valioso por seguir el derrotero que, al final del camino lo que hay es desesperanza, confusión y desasosiego. Establezcamos nuestra escala de valores conforme al orden dado por Dios para que la bendición que resulte sea completa y permanente ... vida abundante en todas las áreas. "Amado, Yo deseo que tú seas prosperado en TODAS las cosas, y que tengas salud, ASÍ como prospera tu alma." 3 Juan 2. O sea, que la voluntad de Dios es que des a lo eterno y vital el verdadero valor colocándolo en primer lugar y luego serás bendecido/a en todo lo demás. Cualquier otro orden carece de fundamento lo que redundará en caos, confusión y peligro inminente para alcanzar la salvación.

En este año que comienza, tomemos la firme resolución de cambiar de rumbo para entrar al mundo de lo, hasta ahora, desconocido, allí en donde se encuentra la verdadera y completa bendición …renovando nuestra manera de pensar y anhelando un cambio de corazón … lo que resultará en beneficio eterno, no solamente para sí mismo/a, sino para nuestros hijos y las generaciones que le seguirán.

¿Amas realmente a tus hijos? Vive para que seas para ellos la garantía del más completo éxito, aquel que lo abarca todo … lo espiritual, lo físico y lo material …olvidando el pasado, disfrutando verdaderamente el presente y gozándote en la esperanza de un futuro seguro, no solamente en el tiempo que te resta en la tierra, sino, por toda la eternidad. “La generación de los rectos será bendita.” Salmo 112:2.

"Camina en su integridad el justo;
sus hijos son dichosos después de él." Prov..20:7

Por: Zaida C. de Ramón

Enero 2008

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